Decir que no siempre ha sido un problema para mi, sobre todo cuando no quiero hacer algo simplemente porque no me da la gana y punto. A mi me han criado para complacer, cosa que me joroba, pues decir NO se convierte en todo una lucha dentro de mi. La semana pasada cuando estuve de camping una compañera de colegio me dejó un mensaje en mi voicemail, Marea mi hermano esta yendo para California con su esposa el fin de semana, ¿crees que se puedan quedar en tu depa? No se por qué tener gente en mi depa no me gusta, el fin de semana es para descansar y tener gente olvídate me da stress, en ese aspecto soy antisocial, también detesto hacer reuniones de cualquier tipo, odio las responsabilidades y en mi tiempo libre quiero hacer lo que quiera y entretener a otros me vale madres, prefiero estar sola o con mi pareja y punto, a no ser que sea alguien especial o muy cercano, realmente admiro a la gente que le gusta dar fiestas.
Después de escuchar el mensaje de mi amiga, de saque pienso ni hablar, pero ¿cómo se lo digo? Pensé y traté de crear una excusa, …, le digo que me voy de campamento, o que mi pareja trabaja trasnoche viernes y sabado y la verdad necesita dormir durante el día, que es cierto…caracho por qué no puedo decirle NO porque no me da la gana y sentirme bien. En fin me olvidé del asunto y no le devolví la llamada cuando de pronto la secre me dice, te llama Juan, Aló, Hola Marea, ¿te acuerdas de mi? si claro, un favor, voy a ir con mi esposa para Cali, ¿tu crees que nos podemos quedar en tu depa? Lo siento Juan pero no se va a poder, ya tengo planes para este fin de semana, tienen que avisarme con un mes de anticipación mínimo. Hablamos de cualquier cosa y listo, !lo hice! Le dije que NO, lo sobreviví. Qué alivio, ojalá sea el comienzo de muchos NO en mi vida. ..NO quiero ir a comer a la calle, NO quiero ver esa peli, NO quiero ir a bailar, NO quiero que compremos eso, NO tengo tiempo para tomar ese caso, NO, NO, NO, NO.