Un Día en El Silencio I

Mi último día en Lima, Enero del 2006. Decidí ir con mi cuñada al sur a la playa El Silencio aunque sea por tres horitas para agarrar la última dosis de sol y bronze. El mar estaba hermoso y había poquísima gente, mejor no podíamos estar cuando de pronto comienza el desfile de vendedores, al principio normal eso siempre se ha visto, pero luego se aparecían con las cosas más inesperadas, huacos, bolsitas de la India, marionetas, aparte de todo lo pirata que puede haber como CDs, DVDs y libros, los pedilones no faltaron tampoco. Estuvieron presentes costa, sierra y selva fue un día de playa lindo y a la vez triste porque me dejó ver la pobreza y el ingenio de las personas para buscarse el pan. Tomé fotos hasta que se me acabó el film, aquí les va la primera parte.