Thursday, November 09, 2006

COMPETITIVA

Me levanté como cada mañana, 5:45 a.m. me lavo los dientes, me pongo mi ropa de baño, y me visto para ir a nadar, salgo abrigada pues ya hace frío, las estrellas todavía pestañean en el cielo que casi comienza a cambiar de color, ubico a las Tres Marías que me acompañan desde mi chiquitud y bajo la loma en la bici sin usar los frenos, el aire frío me enfría los cachetes, cruzo todas las luces en rojo y llego a la piscina, encadeno mi bici y entro media dormida, poco a poco llega la gente, agarro mis aletas, la tablita y la boya, escojo mi línea, me saco la ropa lentamente, la profe nos apura “come on guys” y saltamos al agua, la piscina iluminada en la noche se ve hermosa, parece la laguna de Llanganuco, así lo pienso yo, tiene un color turquesa muy peculiar, en el agua me abrigo algo porque afuera hace más frío que dentro del agua.
No me considero competitiva pero es algo que no puedo evitar, siempre me estoy midiendo con la persona que nada a mi costado y trato de ganarle cada vez, no está mal pues me motiva, pero a la vez me jode estar pensando en ganar a la persona del costado, es absurdo teniendo en cuenta que muchos de los que no están junto a mí son velocísimos, es más yo soy una de las tortugas. Hoy teníamos que nadar 15’ sin parar y contar cuantos laps habíamos nadado, la última vez hice 28 así que esta vez tenía que hacer o lo mismo o más, a mi costado estaba Michael un negro cuerponazo como de metro ochenta, el hombre es torpe en el agua pero persistente, la vez pasada él hizo 27 laps así que estábamos casi parejos. “En diez segundos comenzamos” nos dice la profe, todos nos tratamos de relajar y la profe grita “GO” y a nadar se ha dicho, Michael y yo estábamos pegados, parecíamos siameses, como me jodía eso, como somos muchos en la clase una línea es compartida por dos y como él es grandazo y yo no me quedo atrás es algo incómodo nadar tan juntos pero ni modo, cada vez que volteaba para respirar veía su cuerpo a mi costado, por momentos lo pasaba por medio cuerpo, a veces un cuerpo entero pero luego Michael se recuperaba y me volvía a alcanzar, carajo! Ya en el lap 28 empecé a quemar mi última fuerza y lo dejé atrás pero no por mucho, yo hice 29 laps y el casi 29, gané por dos metros, casi nada pero lo logré, ji, ji, sigo sin entender el por qué me siento tan competitiva en la piscina, porque la verdad no lo soy.

6 Comments:

Anonymous Anonymous said...

es espectacular ser competitivo

y mas aun si nadie se da cuenta

y encima les ganamos

6:00 PM

 
Blogger Ev said...

a pesar q siempre me senti obligada a ser competitiva,recien puedo saborear- sin ser vanidosa- el ser competitiva.
CHEVERE! le ganaste al negrote!

7:54 PM

 
Blogger Enakam said...

Qué bueno que tengas el espíritu competitivo. De pequeño y hasta hace unos años siempre he practicado muchos deportes y obviamente disfrutaba la victoria. Sin embargo al salir del círculo habitual me encontraba con que no era tan bueno, lo que me decepcionaba un poco, y me di cuenta que detalle para sentirme mejor, sin volverme mediocre, era competir conmigo mismo. Mejorar mi marcas anteriores.

7:20 AM

 
Blogger shung said...

la competencia con uno mismo =)

8:10 AM

 
Blogger Marea said...

Sí Alfredo y Evy, le gané, ja.
Ana Lucia, ojalá que para la próxima no me toque nadar junto a el, el repechaje sería la muerte.
Enakam, me has dicho lo preciso, a la próxima me voy a concentrar en llegar a 30 laps y competiré conmigo misma XD.
Shung, sí con uno mismo es la cosa.

10:45 AM

 
Anonymous Anonymous said...

jajaja dos siameses, todos sentimos eso creo yo, lo relaciono con la supervivencia del ser humano.

5:59 PM

 

Post a Comment

<< Home

 
Bookmark and Share